Cuando damos lo mejor de nosotros mismos a otra persona, cuando decidimos compartir la vida, cuando abrimos nuestro corazón de par en par y desnudamos el alma hasta el último rincón, cuando perdemos la vergüenza, cuando los secretos dejan de serlo, al menos merecemos comprensión. Que se menosprecie, ignore o desconozca fríamente el amor que regalamos a manos llenas es desconsideración o, en el mejor de los casos, ligereza. Cuando amamos a alguien que además de no correspondernos desprecia nuestro amor y nos hiere, estamos en el lugar equivocado. Esa persona no se hace merecedora del afecto que le prodigamos. La cosa es clara: si no me siento bien recibido en algún lugar, empaco y me voy. Nadie se quedaría tratando de agradar y disculpándose por no ser como les gustaría que fuera
¡Nadie te va a dar lo que tu mismo no te das¡
¡Amate y defiende tu derecho a ser amado¡
Ya casi llegamos....sigue adelante.....un abrazo....Viviana
Recuerda escribirme a vivianaordaz@yahoo.com.mx para recibir este parche
1 comentario:
Lindo viviana asi es como lo as redactado
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